El Tren Gris

Es curiosa la relación que se forma entre el contacto tangencial y breve con una persona cualquiera y la idea inmediata que de ella nos hacemos en la cabeza, creyendo conocerla totalmente y poder emitir un juicio sobre ella razonablemente acertado, el tiempo y la vida me han demostrado en ocasionas cuán estúpida es esta relación.
El libro que acabo de terminar es el segundo que leo de Oscar, para los que no lo sepan es el hijo de mis vecinos de enfrente de toda la vida, sus padres y mis padres son amigos desde que yo nací puesto que llevan 27 años viviendo puerta con puerta. Mis vecinos tienen dos hijos, el mayor un año menor que mi hermano y Oscar un año menor que yo, por lo tanto hemos pasado de niños algún tiempo juntos aunque solo fuera en las pequeñas celebraciones familiares. Y yo creía tener una idea de como era o es, la verdad es que siempre fué un chico tímido y callado o eso es lo que yo percibía, y bastante metido en sí mismo, en esa edad solo te llaman la atención los hechos tangibles, es decir, lo que se ve y no lo que se puede intuir, eso llega más tarde.
Cuando hace unos meses mi madre me comentó que había leído la primera novela de mi vecino me entró una gran curiosidad por leerla, por comprobar cuánto podía parecerse lo que leyera a la idea que yo tenía en mi cabeza. Esa primera lectura me encantó y me demostró que no siempre lo que se vé es lo que hay, y como ocurre en las grandes ciudades puedes tener a personas muy cerca, compartir tiempo con ellas y no llegar a conocerlas ni siquiera un poquito.
Este segundo libro además me ha parecido un alarde de valor, hace algo que todos debieramos hacer en algún momento pero que no se cuantos seríamos capaces de aceptar si nos lo hicieran a nosotros,... habla de personas queridas y las muestra como las ve, con lo bueno y con lo malo y a mi que conozco a las personas de las que habla me ha sobrecogido con que sinceridad habla de algunas cosas, quisiera hacer lo mismo, y de hecho lo he intentado en ocasiones pero es muy dificil la sinceridad, todos la tenemos siempre en la boca como un ideal pero nos tiramos de los pelos cuando se nos muestra por boca de otros.
Me ha encantado Oscar, como ya te dije tienes un don, no se si para poder vivir de él, pero desde luego si para vivir "con" él, sabes llegar a lo que hay más allá de las fachadas, has encontrado el camino para mostrar al mundo quién eres y qué tienes, y a través de tus palabras los demás podemos también vernos a nosotros mismos, es más de lo que muchos pueden decir.
Me alegro de haberte conocido al fin,