Ayer cogimos la bici y fuimos a un coffeshop en el medio de ninguna parte, nuestros cuerpos estaban en Holanda y nuestras mentes vete a saber dónde. Sentados en el sofá frente a una imagen de Shiva fumando white widow tranquilamente. Mi compa;ero alemán me dice: Do you want to play? Miro hacia atrás para ver a que están jugando y veo a 4 holandeses jugando al futbolín. Yes, I’d love it!
Así que pusimos nuestra moneda para jugar con los winners. A veces hace falta tan poco para conseguir tanto. ..Otras hace falta mucho para no conseguir demasiado. En fin, que me eché unas partidas muy divertidas. Las típicas conversaciones sobre cómo se juega en cada sitio, los goles que cuentan y no cuentan, muy diferente la manera de jugar. Así que cada vez que alguien metía un gol miraba quién movía el contador que hay a cada lado de la portería y flipaba, so different! Una de sus reglas me llamó la atención y me hizo reir acerca del carácter que hemos mamado cada uno sólo por nacer en un sitio determinado. Un portero de futbolín espa;ol se ríe cuando alguien le mete gol pero la bola rebota en la pared y vuelve a salir fuera: ese gol no cuenta, ahh, te jodes... Un portero holandés lo cuenta como gol ya que la bola ha entrado aunque después haya salido y se sigue jugando.
kus!!!
1 comentario:
Animo peligrossa, demúestrales a los tulipanes que eres heredera de Santillana!!!
Y no olvides traer especiasssss :-)
Publicar un comentario