lunes, 26 de mayo de 2008

El caliz de las mil sonrisas


El caliz de las mil sonrisas
a la montaña eterna iré a buscar
para llevárselo a mi niña
y ver sus labios resucitar.

Duendes, elfos y hadas
el camino me marcarán,
por senderos y lianas
a la tierra del grial.

No desfallezcas amor mío,
aguanta firme en tu lugar,
las pruebas que impone el camino,
enriquecen tu humanidad.

Y cuando el mágico líquido
resbale por tu garganta,
tus labios, como los de un niño,
sonreirán a la mañana.

!que todos sean testigos!
!que nadie se quede en casa!
!que el mundo entero disfrute contigo,
y tu risa cure su alma!

Desde esta, mi atalaya,
contemplaré la alegre chanza,
y de mi pecho saldrán águilas
que al cielo eleven mis alabanzas.

1 comentario:

Romulo dijo...

La sonrisa es más barata que la electricidad y da más luz