Tiempo de sueños,
tiempo de penas,
corre sin freno,
corre la arena.
Busco recuerdos
de tierras ajenas,
busco en silencio,
mi alma en la hierba.
Años de esfuerzos,
riegan mi esencia,
años de intentos,
y también de indolencia.
Extraño sentimiento,
en la noche me atormenta,
corro y corro, sin aliento,
perseguido por la bestia.
No descanso ni un momento,
acosado en cada puerta,
miro atrás, a mi tormento,
intuyo mi rostro tras la careta.
No hay enemigo siniestro,
el adversario no está fuera,
el temido sortilegio,
en mi interior esconde la respuesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario