miércoles, 26 de noviembre de 2008

Nicaragua sigue sufriendo

En 1979 los sandinistas lograron derrocar del poder al dictador Somoza tras duros años para el país. Lamentablemente muchas veces lo que parece una salvación no pasa de ser un mero problema más, uno nuevo dictador encubierto que hace lo posible para mantener el poder, aunque sea a base de hostias o de cometer actos irregulares en las elecciones presidenciales.

Os enlazo un artículo de Gioconda Belli que salía en la edición de hoy de El País. Sencillamente lamentable lo que sucede en Nicaragua. Ojalá algún día se pueda hacer realidad el canto de Mejía Godoy, ese pueblo y esa gente se lo merece por encima de todo lo que les rodea.



1 comentario:

Rincón oscuro dijo...

(para quien quiera, tengo un libro de poemas de Gioconda Belli.)
Una revolución nunca podrá "institucionalizarse", pues son términos completamente opuestos, y cuando una revolución se "institucionaliza" es que ha dejado de ser una revolución...Y ahí es donde peligra la buena intencionalidad de una causa "libertaria".
Como ya dijo alguien, "el poder corrompe, y el poder absoluto corrompe absolutamente".