martes, 13 de abril de 2010

Llegada

qué verde está Castilla
qué ciudad más pequeña
qué ligero, el aire
qué frío hace
qué café más rico
qué silencio en la oficina
qué mesa más grande
qué raro, todo
 

2 comentarios:

peligrossa´maríha dijo...

Si, que raro todo, te entiendo.

Acabo de llegar a Madrid después de 16 meses trotando por campos y junglas. Y no reconozco el nuevo medio, muy raro cuando se trata de la ciudad en la que has vivido 33 añazos.

Me gustaría encontrarnos un día de estos.

Un abrazo

Rincón oscuro dijo...

A veces no hace falta estar fuera tiempo para sentir que todo es distinto, que todo ha cambiado en el momento de un instante. Que todo lo que te rodea tiene de repente otro significado, y entonces no sabes muy bien qué haces aquí.