Nadie es una isla, completo en sí mismo; cada hombre es un pedazo de continente, una parte de la tierra; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia. La muerte de cualquier hombre me disminuye porque estoy ligado a la humanidad; por consiguiente nunca hagas preguntar por quien doblan las campanas: doblan por ti.
Durante estos días muchos sentimos que contigo se nos ha ido un poco de nosotros mismos. Familiares, amigos, compañeros del ayuntamiento, compañeros auxiliares de Farmacia, donantes de sangre, muchos te echaremos de menos. Permitidme hacer mención a la persona que ha sido la mejor extensión posible de su familiar durante los últimos meses, Pura, y que pudo escuchar por última vez su forma tan personal de despedirse. "Si Dios quiere", contestaba cuando le decías "hasta mañana". Así fue durante muchos años hasta esta noche del 6 de abril cuando su corazón se cansó de latir. No habría sido complicado pensar que nos abandonaría de la forma que mejor define su personalidad: tranquilo, en paz, sin hacer ruido, escogiendo un día de vacaciones para decir adiós, evitando molestar, no queriendo que nadie moviese ningún plan para decirle adiós, escogiendo un día en el que no salen esquelas para no ser noticia.
Te has ido, pero nos dejas tu educación, tu gratitud, tu tranquilidad, tu saber amar. La muerte es el destino que todos compartimos, lo que termina de dar sentido a nuestra vida como seres humanos. Por mi parte, haré todo lo posible para que el día que llegue mi hora haya hecho méritos para estar tan acompañado como tú estuviste y la frase que se escuche alrededor sea la que escuché el sábado mientras te despedíamos. "qué buena persona era tu abuelo".
Gracias
1 comentario:
Seguro que le habría encantado leer esto.... descanse en paz...
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