Mi tributo a la mujer carioca. La de carne y hueso, digo. La que veo en las ruas de Rio.
Harto de que me pregunten por un estereotipo que difícilmente veo, y que lo hagan con esa sonrisita boba de quien no valora lo que tiene alrededor, entre otras cosas. ¡Vengan y vean!
No hay comentarios:
Publicar un comentario